El proyecto está impulsado por la fábrica de Cerámica Maguary, una industria productora de mahones de cerámica roja localizada en el municipio de Nazaré da Mata, al noroeste del Brasil. Antes de la ejecución del proyecto, el combustible utilizado para calentar los hornos de cerámica era madera nativa obtenida de la desforestación del bioma Caatinga, un ecosistema amenazado. Esta madera se considera biomasa no renovable, ya que se obtiene de zonas donde no se realizan actividades de reforestación o gestión sostenible. Con la ejecución del proyecto, la fábrica calienta los hornos con biomasa renovable procedente de madera de Algaroba, subproductos de caña de madera, madera nativa de zonas que cuentan con una gestión forestal sostenible, serrín y residuos de madera procedentes del sector industrial y de la construcción. Más Info.

